T.O.: My soul to take. 2010.Relativity Media. Director:Wes Craven. Guión: Wes Craven. Reparto: Adam Heller (Max Thieriot), Jerome King (Denzel Whitaker), Abel Plenkov (Raul Esparza).
Almas condenadas es la historia de un grupo de adolescentes, residentes en un pueblo de Estado Unidos, que tienen la desgracia de nacer el mismo día que desapareció un asesino en serie que aterro dicha comunidad. Unos años más tarde dicho asesino atacará de nuevo a los chicos para hacerse con sus almas, ¿o es su alma la que ataca para hacerse con sus cuerpos?. Tendrán que descubrir el misterio para frenar su malvada actividad.
Wes Craven ha demostrado este año, con este film y "Scream 4", que su cine ya no puede ser tomado en serio. La fórmula que antes utilizaba y que le dió tanto éxito ("Las colinas tienen ojos", "Pesadilla en Elm Street" o "Scream") ya no tiene tirón. Y la falta de garra no se debe solo al tipo de films, sino a como los rueda. Los chistes, que antes eran referencias irónicas y graciosas a la realidad de los jóvenes norteamericanos, ahora no tienen nada de comicidad, de hecho resultan cargantes por utilizar como referencia otros productos pésimos, como la saga "Crepúsculo" a la hora de enseñarnos a los adolescentes. Otro mal de sus dos últimos films es esa perdida de fuerza en las imágenes, antes nos asustaban las apariciones de Krueger o Ghostface, ahora nos dan risa; y, es que, Sr. Craven, hay que adaptarse a las nuevas tecnologías y medios si no se sabe utilizar la forma clásica de una manera apropiada.
Almas condenadas consigue hacer el ridículo como film de terror y más parece una sátira, tal y como pasaba con "Scream 4". Ojalá Craven recupere la buena forma con algún nuevo film.(2'5/10)
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