sábado, 28 de mayo de 2011

Piratas del Caribe. En mareas misteriosas

T.O.: Pirates of the Caribbean: On strangers tides. 2011.Walt Disney Pictures. Director: Rob Marshall. Guión: Ted Elliot, Terry Rossio, según la novela de Tim Powers. Reparto: Jack Sparrow (Johnny Depp, Angélica (Penélope Cruz), Barbossa (Geoffrey Rush), Barbanegra (Ian McShane).

 Según empieza la cuarta entrega de la saga de Piratas del Caribe me entró una sensación irremediable de pereza ante lo que estaba por venir debido a la pérdida de interés que me provocó "Piratas del Caribe 3". Los españoles se han hecho con la información que les permitirá encontrar la fuente de la juventud y parten en su busca. Por su parte, los ingleses únicamente cuentan con un hombre para encontrar dicha fuente, alguien que ya ha estado en ella una vez: el capitán Jack Sparrow. Le ofrecen la libertad si les ayuda en la búsqueda, bajo las ordenes del capitán Barbosa (que ahora es un siervo del reino, un corsario). Jack rechaza la oferta y huye de prisión. Por el camino la hija del mas temible de los piratas, Barbanegra, le engañará y lo embarcará en el navío de su padre para que los guía a la Fuente. Así, Jack se vera inmerso en una aventura por los mares plagada de peligros.
"Piratas del Caribe 4" es mejor en relación al capítulo anterior de la saga. Se centra mas en las aventuras de un solo personaje, Jack, y los demás pasan a un segundo plano. Esto es lo que afectó a las dos pelis precedentes, las historias y personajes eran tan variados que el espectador perdía el hilo  y le daba igual el contenido de lo que estaba viendo, todo valía con tal de que fuese más espectacular que
lo visionado previamente. Así sucedió, que "Piratas del Caribe 3" se convirtió en un producto comercial que demostraba que cuando tienes una idea muy buena pero te vendes a los estudios de Hollywood todo está perdido (lo mismo ha ocurrido con "Transformers", la segunda parte no hay quien se la fume y la tercera, ya veremos). La duración es excesiva y responde a la ambición de los productores norteamericanos por enganchar a los espectadores durante mas de dos horas en una butaca mostrándoles todo tipo de artificios para engancharles a la siguiente entrega. En mi opinión, con hora y media, este tipo de films quedarían resueltos de maravilla y contarían las historias mucho mejor y más escuetamente.
En cuanto al reparto, Penelope Cruz (la gran novedad de la saga), esta bastante discreta algo que favorece su aparición. Johnny Depp, como Sparrow, resulta a estas alturas de lo más estridente y llega, incluso, a irritar con sus gestos amanerados, sus movimientos nerviosos y su forma de hablar. El capitán Geoffrey Rush, como siempre, está muy bien, aunque apenas tiene minutos en pantalla. He de destacar la breve, pero divertida, aparición de Oscar Jaenada interpretando a un agente español enviado por el rey.
En fin, entretenimiento familiar de primer orden, un poco mejor que las dos entregas anteriores (aunque se echa de menos a Bloom y Knightley). No está a la altura de "Piratas del Caribe. La maldición de la Perla Negra" ni de Hook, pero lo peor no es su calidad, sino que da a entender que la saga continúa, ¡que horror!. (4/10)

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